En el mes de enero de 1908,  Manuel Galindo, por aquel entonces director del Museo Arqueológico de Córdoba, remite la presente carta al Padre Fita solicitándole ayuda con una inscripción griega que custodiaba dicha institución, por creerle "la persona más competente para este asunto". Adjunta a la carta la impronta de dicha inscripción, la cual se presentaba como una marca de alfarero de un ánfora.

Por un artículo en el Boletín de la Real Academia de la Historia del Fita, conocemos el estudio que hizo de la misma. El clérigo afirma que fue transcrita por Emil Hübner bajo el número 6254 II, sin dar una interpretación. Como puede apreciarse en una fotografía posterior que le  enviará de nuevo Galindo, se repite dos veces el nombre del fabricante y el mes abreviado, pudiendo traducirse como De Diofanto en el mes Bucacio, añadiendo Fita que una estampilla prácticamente igual a esta se halló en Noto (Sicilia), registrada por Franz en el Corpus inscriptionum graecarum, vol. III, nº 5468 c. (Berlín, 1853). 

A esto añade que en aquel momento, se halló una muy parecida en Villaricos por Luis Siret.